domingo, 27 de diciembre de 2020

A PROPÓSITO DE GUSTAVO SANTAOLALLA Y EL ROCK VENEZOLANO

 

A PROPÓSITO DE GUSTAVO SANTAOLALLA Y EL ROCK VENEZOLANO

 

Si hay algo que se le debe reconocer a Netflix es la efectividad de sus campañas publicitarias para promover sus series audiovisuales, reconozco que la dinámica ha provocado grandes debates en la sociedad, generando éxitos en su convocatoria masiva, sin importar crear sentimientos positivos y negativos hacia la atención de la producción del momento. No he tenido la suerte de ver ninguno de sus especiales, no por desinterés, sino porque Venezuela no tiene forma de afiliación a la aplicación que por la situación de régimen de control cambiario obliga a la ciudadanía a vivir sin acceso a su programación.

Personalmente he estado al tanto de todas las series que se han presentado en Netflix pero no he llegado a un nivel de polemizar sobre su programación, sin embargo, no puedo escapar al tema de actualidad que trata sobre el Rock en Español, conocido como “Rompan Todo” bajo la producción del reconocido artista Gustavo Santaolalla como investigador del tema. La serie trata sobre un análisis de la región latinoamericana del desarrollo del Rock en español, resaltando a los países protagonistas del género donde no se incluye la presencia de Venezuela en la respectiva serie.

La respuesta de muchas personas ha sido tan recriminadora hacia Santaolalla que han llegado al nivel de casi criminalizar la apreciación sin hacer una introspección del desarrollo de nuestra escena nacional. Sin embargo los buenos conocedores del Rock nacional si han entendido el mensaje que se nos quiere dar. Pude ver comentarios de Félix Allueva y Rafael Uzcátegui por nombrar algunos que si entendieron el mensaje que nos están dando a los venezolanos para mejorar a la escena rockera del país.

En lo imposible traté de conseguir como ver esta serie y solo pude accesar a algunos documentales en la red que tratan como se realizó la producción del polémico audiovisual. Es importante saber digerir este trago amargo con mucha madurez porque también para mi, el Señor Santaolalla tiene razón sobre la investigación que realizó, nos guste o no. Claro está que soy un músico que hace reggae y no rock, pero considero que ambos géneros musicales son afines (Ese sería otro tema a tratar). En Venezuela nunca ha existido una industria musical en general y la idea de esta reflexión es exponer ciertos factores que han influido en esta situación real.

Para emitir un juicio sobre la escena musical primero que nada hay que conocer como es su Sociedad, por lo que se puede reconocer que el venezolano es muy adicto a la música e incluso se puede aceptar la presencia de talento para ejecutarla por ser muy rítmico y el dominio de algo que podemos llamar guataca para asimilarla. Sin embargo apreciar el trabajo del artista en vivo por el público, no depende de su iniciativa sino de la promoción mediática de los hechos predominantes en la escena.

La situación geográfica presenta el predominio cultural del eje del Caribe partiendo desde el son cubano, el reggae de Jamaica, el calipso y el socca de Trinidad y Grenada, la bachata y el merengue dominicano, la salsa y el reguetón puertorriqueño, el vallenato colombiano, hasta el bosanova y la samba brasilera. Posiblemente faltan más corrientes musicales, pero Venezuela está rodeada de tendencias musicales excelentes por todos los puntos cardinales. El nivel de competencia con las corrientes globales como el Rock y Pop es muy parejo debido a la cercanía de estas culturas y el idioma con la geografía local.

Si se analiza la distribución de los gustos musicales de cualquier ciudad venezolana, el Rock no es la preferencia dominante. Por ejemplo, si tomamos a Caracas como referencia estadística, las zonas mas pobladas de la ciudad como el este (Petare) y el oeste (Catia) predomina la salsa y el reguetón como los géneros musicales mas masivos. No conozco un ídolo del rock venezolano que haya trascendido mas que Nacho, Oscar de León, Franco de Vita, Ricardo Montaner, Guaco, Gustavo Dudamel, Servando y Florentino y para usted de contar cualquier artista comercial. Caso contrario Alex Lora o Fher en México, Juanes y Andrea Echeverri en Colombia, y los monstruos Charly García, los Soda, Fito Páez y junto a muchos más en Argentina.

Otro factor que ha sido enemigo del rock nacional es el desconocimiento por parte de la televisión comercial, discriminando el género por otras corrientes musicales. Si se hace un análisis de los espacios que promocionen el talento local rockero no se llega a diez espacios en toda la historia de la televisión venezolana. Los puedo mencionar: La música que sacude el mundo, la video jockey, a toque de rock, el show de Renny, a puerta cerrada, sonoclips, el garage, el canal del Puma (Puma TV) y si existe alguno mas lo recordaremos en los comentarios (especifíquenlo por favor).

Otro de los factores determinantes en la falta de desarrollo del rock venezolano es el sistema de trabajo de las compañías discográficas que lamentablemente desaparecieron de la escena nacional. En sus momentos de existencia se dedicaron a crear y apoyar productos en función de lo que predominaba en la escena internacional y nunca vieron el rock como una alternativa, sino, que se sentían en la obligación de tener un artista juvenil en su nómina sin importar que tipo de música ejecutara.

Las compañías que tuvieron afiliación con las disqueras internacionales lograron proyectar artistas como Franco de Vita, Ricardo Montaner, Guillermo Dávila pero casos como Sonográfica que no tenía afiliación internacional no pudo proyectar a grandes artistas como Ilan Chester, Yordano, Adrenalina Caribe, Colina, Sergio Pérez, Mulato y todo su catálogo. Es lamentable que a estas alturas hayan desaparecido del universo musical y solo casos de editoras independientes e incluso ONGs sean las que ofrecen oportunidad a los artistas a exponer sus producciones.

Recordando entre testimonios y referencias del rock venezolano puedo reconocer en mi vivencia como el mejor momento, la etapa del heavy metal y el hard rock en los inicios de los ochenta cuando las agrupaciones internacionales de la época lograron penetrar a todos los estratos sociales en la juventud. El boom de ACDC, Iron Maiden, Saxon, Van Halen lograron influenciar en bandas locales como Arkangel, Resistencia, La Misma Gente, Farenheit y otras bandas con un gran poder de convocatoria en cualquier sector del país sin importar la clase social. Ese boom se puede decir que duró alrededor de tres años.

Se puede reconocer que hubo una etapa de crecimiento en el Rock que en la década de los noventas cuando Sentimiento Muerto asumió el reto de presentarse solos en el poliedro y el segundo caso fue un Festival de bandas nacionales en el mismo recinto con Zapato Tres, Caramelos de Cianuro, Radio Clip, Ónice y Dur Dur. En la historia del rock venezolano se puede decir que esos fueron los únicos intentos de llenar el Poliedro con agrupaciones de acá para lograr una hegemonía en la escena. En la actualidad hacer un esfuerzo de ese tipo sería una utopía para rescatar el espacio que merece el rock venezolano.

Sin embargo el desarrollo del Rock como sector musical cautivo ha demostrado una excelente calidad en los músicos, que no tienen nada que envidiarle al artista foráneo. No soy un gran conocedor del género por lo que especifiqué anteriormente que mi área es el reggae pero me puedo considerar como uno de los pocos que comparte con artistas de rock, salsa, ska, jazz, hip hop, reguetón, música llanera, folklore, trova y algunas de las producciones donde he tenido el honor de trabajar, he compartido la buena vibra e incluso aprender de ellos.

Uno de los ejemplos mas reconocidos en estos momentos es el caso de Félix Martin guitarrista que logrado codearse con grandes luminarias internacionales como el baterista Mike Portnoy y el caso del pianista Otmaro Ruiz que ha pesar de no ser específicamente de rock comparte con el gran baterista Simmons Philips. También no se puede obviar la calidad del personal técnico que trabaja en los eventos, es un honor para el país que existan ingenieros de audio que han obtenido grandes reconocimientos internacionales como los premios Grammys. Hay que reconocer el semillero de músicos excelentes e ingenieros de audios que se están desarrollando en el país.

Para culminar con los factores que influyen en el desarrollo del rock es el respeto a los precursores de la música. La moral y la ética también son importantes para darle valor al arte. Cada vez que veo una leyenda viviente de la música venezolana me pongo rodilla en tierra, casos como el de Trino Mora, Colina, Petete, Gerry Weil, Henry Stephen, incluso el mismo Gillman me quito el sombrero por ser precursores vivientes del Rock venezolano, ya hay algunos que nos han dejado. Para nosotros los músicos de Ónice es un aprendizaje compartir con una leyenda como PPS porque tuvo que vivir etapas más difíciles que las de hoy en día y su dominio con el público es una gran escuela.

No quise abordar la realidad política del país para dedicarle mas prioridad a la comparación de la escena venezolana con los países que sin han logrado desarrollar su espacio musical en general. Para despedir tengo una anécdota de dos músicos venezolanos que están haciendo reggae con los grandes de la escena Británica como Dennis Bovell, Mad Professor, los hermanos Tenyue (UB40, Linton Kwesi Johnson y Aswad), Errol Dunkley, Lee Perry, Pablito Molina y otros muchos mas en la actualidad. Ellos son David Delgado baterista y Johan Pérez guitarrista de la agrupación Dub Natty Sessión, que cada vez que hacen producciones con esos señores escuchan cuando Mad Professor les dice en inglés “Pon a Venezuela en el mapa”.

 

sábado, 25 de mayo de 2019